Servicios educativos y pedagógicos
La población infanto-juvenil es el sector de población más vulnerable a los cambios en los modos de vida familiares de hoy.
Los chicos y las chicas viven, en esta etapa de su desarrollo, situaciones que les generan: miedo, inseguridad, falta de confianza en sí mismo/a, problemas de autoestima, de manejo de la frustración, ansiedad, desmotivación, bloqueo, dislexia, déficit de atención, dificultades en la comprensión lectora, expresión escrita y oral. En muchas ocasiones necesitan pautas para la organización y orientación al estudio.
En todos estos supuestos, se requiere de abordajes precoces para obtener resultados lo más eficaces posible.
Las intervenciones están dirigidas a los/as más jóvenes, pero sin olvidar prestar atención a toda la familia y su entorno.