Dormir es una función psicológica muy importante… Es indispensable para nuestra vida y nuestro equilibrio emocional.
Dormir no es simplemente desconectar…; no se trata simplemente de darle al OFF de nuestro cerebro. El proceso de conciliar el sueño es muy complejo; es el momento de hacer balance de lo que se ha hecho en el día y de pensar en lo que se va a hacer al día siguiente.
Para ello, se tienen que cumplir una serie de condiciones: silencio, confort, …
Además, hay muchas diferencias de unas personas a otras. No todas tienen los mismos patrones de sueño. unas son búhos y otras gallinas… Unas personas se activan a partir de las diez de la noche y es cuando mejor se sienten y otras se encuentran mejor y son más productivos pronto por las mañanas.
Hay varios consejos interesantes a tener en cuenta para combatir el insomnio:
– El primero sacar la televisión fuera del dormitorio.
– Otro fundamental no utilizar pastillas para dormir de forma continuada, ya que son muy eficaces a corto plazo pero muy perjudiciales a largo plazo. Sí son recomendables de manera puntual, pero siempre y cuando no se utilicen más de dos a tres semanas, ya que pueden crear dependencia e incluso alterar la calidad del sueño.
– Por último, antes de dormir importante estar relajado/a, buscar tranquilidad para poder desconectar, escuchando música, leyendo un libro, etc… para poder hacer repaso del día y pensar en lo que viene al día siguiente.
– En definitiva, para descansar tenemos que estar cansado/as…, es decir, para dormir bien uno/a tiene que estar en paz con sigo mismo/a, estar satisfecho/a de lo que ha realizado en el día, por muy insignificante que haya sido el hecho en sí…
Enrique Saracho, psiquiatra, psicodramatista y director técnico de Ediren, ha hablado del tema en El Mirador de Radio Vitoria.