Socialmente, está muy extendido utilizar expresiones como «ánimo», «lucha», «tú puedes»… cuando alguien afronta una enfermedad.
Pero esa actitud positiva, que está muy extendida, no deja de ser una «trampa» …; son expresiones que utilizamos como mecanismo de defensa ante el sufrimiento de una persona cercana por miedo a no saber cómo manejar ese dolor.
Las enfermedades no son batallas que hay que ganar o perder…; las enfermedades, simplemente, se sufren… La persona enferma no necesita que le digan que luche por ganar «la guerra de su enfermedad»; lo que necesita saber es que alguien está a su lado para acompañarle en ese duro camino y que podrá «sostenerle» es los momentos más difíciles.
¿Te interesa este tema? Escucha a Arantza Gómez, psicóloga de EDIREN , en El Mirador de Radio Vitoria.
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